Nacimiento y desembocadura del Ebro: ubicación y datos clave
El río Ebro es uno de los ríos más importantes de España. Se extiende por más de 900 kilómetros desde su nacimiento en el sistema Ibérico hasta su desembocadura en el Mar Mediterráneo. Su recorrido atraviesa las comunidades autónomas de La Rioja, Navarra, Aragón, Cataluña y parte de Castilla y León.
En este artículo web, vamos a profundizar en la ubicación del nacimiento y la desembocadura del río Ebro, así como en algunos datos clave sobre él. Descubriremos cómo este río ha sido un elemento fundamental en la historia y la economía de España, y cómo su caudal ha sido gestionado a lo largo de los años para satisfacer las necesidades de la población y de la industria.
Origen y desembocadura del Ebro
El río Ebro es uno de los más importantes de la península ibérica, con una longitud de 910 kilómetros. Nace en el Pico de los Tres Mares, en la cordillera Cantábrica, a una altitud de 2.175 metros sobre el nivel del mar. Desde allí, discurre en dirección sur, atravesando gran parte del territorio español.
A lo largo de su recorrido, el Ebro atraviesa varias provincias y comunidades autónomas, como Cantabria, Burgos, La Rioja, Navarra, Zaragoza y Tarragona. Su cuenca hidrográfica abarca un total de 85.550 kilómetros cuadrados, lo que lo convierte en el segundo río más caudaloso de la península ibérica, después del río Tajo.
El Ebro desemboca en el mar Mediterráneo, formando un amplio delta que se extiende sobre una superficie de 320 km². Este delta se encuentra en la provincia de Tarragona, cerca de la ciudad de Amposta, y está considerado como uno de los humedales más importantes de Europa.
En su desembocadura, el Ebro forma varios brazos que se dividen en numerosas islas y zonas pantanosas. La región del Delta del Ebro es conocida por su rica fauna y flora, así como por sus arrozales y su exquisita gastronomía. Entre las especies animales que se pueden encontrar en el delta se encuentran aves migratorias, flamencos y nutrias.
En definitiva, el río Ebro es un río muy importante en España, tanto por su longitud como por su caudal y su importancia económica y ecológica. Su nacimiento en los Picos de los Tres Mares y su desembocadura en el mar Mediterráneo son dos de los puntos clave de su recorrido, que merece la pena conocer y explorar.
Ubicación del nacimiento del Ebro
El río Ebro es el más caudaloso de España y uno de los más importantes de la península ibérica. Su recorrido de 910 km lo convierte en el segundo río más largo de España, después del Tajo.
El nacimiento del Ebro se encuentra en la cordillera Cantábrica, en la provincia de Burgos. Más específicamente, en el monte llamado Fontibre, que se encuentra a una altitud de 1.078 metros sobre el nivel del mar.
El manantial de Fontibre es el lugar donde el río Ebro comienza su recorrido hasta desembocar en el mar Mediterráneo. Este manantial se encuentra en una zona de alta montaña cubierta de bosques y praderas, en un paisaje de gran belleza y valor ecológico.
El caudal del manantial de Fontibre es variable a lo largo del año, dependiendo de las lluvias y la nieve que se acumulan en la cordillera Cantábrica. En épocas de lluvias intensas, el caudal del manantial puede llegar a los 1.000 litros por segundo, mientras que en épocas de sequía puede reducirse a una décima parte de esa cantidad.
El nacimiento del Ebro es un lugar muy visitado por turistas y amantes de la naturaleza. Además, es el punto de partida de una de las rutas más populares de senderismo de la cordillera Cantábrica, la Ruta del Ebro, que sigue el curso del río desde su nacimiento hasta su desembocadura en el Mediterráneo.
En resumen, el nacimiento del Ebro se encuentra en el monte Fontibre, en la provincia de Burgos, a una altitud de 1.078 metros sobre el nivel del mar. Este manantial es el punto de partida del río más caudaloso de España, que recorre 910 km hasta desembocar en el mar Mediterráneo.
En definitiva, el río Ebro es uno de los más importantes de España, con una longitud de más de 900 kilómetros y una cuenca hidrográfica que abarca gran parte del territorio nacional. Su nacimiento se encuentra en Fontibre, en la provincia de Cantabria, y su desembocadura en el mar Mediterráneo, en el delta del Ebro, en la provincia de Tarragona. Además, es un río con una gran importancia histórica, cultural y económica para las regiones que atraviesa, siendo utilizado para la generación de energía hidroeléctrica, la agricultura y la pesca, entre otras actividades. Sin duda, el Ebro es un río que merece ser conocido y apreciado por todos.